NEW YORK.- El voto del dominicano del exterior no es un privilegio que puede ser erradicado o suspendido en cualquier momento por caprichos o necesidades de un grupito con propósitos politiqueros. El derecho del voto del dominicano en el exterior está amparado bajo las leyes que establece la constitución de la República Dominicana.
Los residentes del exterior tenemos el mismo compromiso a participar de las elecciones presidenciales y ejercer el derecho que nos da la constitución dominicana de elegir y ser elegido que los que residen en territorio dominicano. Los ánimos de querer erradicar las votaciones del exterior es un acto completamente ilegal en el marco jurídico y una notable violación a la constitución dominicana, por consecuente, cualquier presidente electo en República Dominicana sin la celebración de elecciones en ultramar resultaría ilegítimo.
La propuesta de querer erradicar las elecciones presidenciales dominicana del exterior es solamente una forma de escape al castigo electoral que viene demostrando la comunidad del exterior al gobierno de turno.
Los gobiernistas y bocinas saben que los dominicanos trabajadores, y preocupado por el país darían un voto de conciencia, no inducido por prebendas personales y en favor de un cambio total del manejo de la administración pública en RD. Estos gobiernistas conocen que sin la participación de ultramar un 8% a 10% no será contabilizado en su contra de la votación total nacional, por lo tanto mandan sus bocinas y mercenarios políticos a entorpecer el curso legítimo de la constitución mostrando hoy en día una preocupación cínica y caprichosa por el bienestar de las diáspora, en una acción no existente en tiempo anteriores, pero entendemos que su única prioridad es obstaculizar y cancelar la votaciones del exterior.
Las elecciones en el exterior deben implementarse bajo medidas restricta y supervisión de la JCE como siempre para que el nuevo presidente electo de la República Dominicana pueda ser conocido legítimamente por los organismos internacionales de lo contrario causaría un cao internacional.
Los gobernantes deben entender que nosotros los dominicanos del exterior hacemos un aporte substancial al PIB y en tiempo de necesidad siempre estamos presente, pero estaríamos dispuesto a minimizar el aporte al país en caso de que se nos quiera tratar como extranjeros o ciudadanos de 5ta categoría al violar los derechos que nos confiere nuestra constitución logrado con largas luchas y sacrificios durante la historia.
“El derecho de voto es un derecho que nada ni nadie puede quitar a los ciudadanos”, Jean Jacques Rousseau.
Por Frankie Sánchez
