Para los dominicanos está semana será de muy desagradables recuerdos, pues los hechos sucedidos en la misma harán que sea de triste recordación, sólo pensar en que murieron más de 7 personas por hechos violentos como atracos, sicariatos y emboscadas del crimen, hacen que esto parezca una película de acción y terror en la República Dominicana.
Las muertes presentadas en el Bonito de San Isidro, donde dos sicarios llegan a bordo de una motocicleta, y la emprenden a tiros contra un auto donde estaban tres personas de las cuales fallecieron dos, fue un asesinato, la muerte de un turista español a 500 metros del peaje de las Américas, ha conmocionado el país, las muertes de unos atracadores que intentaron robar una tienda de joyas fue una respuesta del dueño de la tienda y, como si esto fuera poco, el sábado en la madrugada una familia se desplazaba en dos vehículos luego de salir de una cabaña familiar y un vehículo en movimiento la emprendió a tiros contra ellos, dejando un saldo de 6 heridos incluyendo niños de 12 años que iban en los vehículos, esta acción cobarde deja muy claro la forma sin piedad de estos asesinos en la calle.
Estos hechos sin duda son un desafío a la autoridad en el país, las autoridades deben actuar con manos de hierro contra esta delincuencia moderna, no debe existir contemplación contra los que perpetraron estos hechos, pues los mismos derechos que ellos tienen para actuar así, esos mismos derechos tienen las víctimas y las autoridades para cambiarlos, basta ya de paños tibios contra la delincuencia moderna.
No sólo la responsabilidad de luchar contra el narcotráfico, también la es en estos sucesos, hemos observado los atracos realizados por rateros contra la población común, donde uno o dos personas se desplazan en motores y vehículos, donde abordan a las personas y los despojan de sus pertenencias, también hemos observado cuando estos individuos penetran a los negocios, a los hogares y despojan con violencia a las personas de sus cadenas, Guillos, teléfonos celulares y dinero en efectivo, sin tener las consecuencias que amerita esa acción repugnante, esa es delincuencia común que en esta ocasión está generando la desesperación de la población, mejor llamada ratería, que no tiene nada que ver con el narcotráfico, claro la lucha contra el narcotráfico debe continuar sin pausas, pero está ratería es la que está acabando con La Paz del país en este momento.
El presidente Luis Abinader manifestó que en su gobierno no permitirá hacer negocios con el narcotráfico para evitar los acto delincuenciales que nos azotan, enviando un mensaje claro a las autoridades pasadas sobre este tema, a esto sólo le explicaré al público que nos lee, cuál es la diferencia entre el narcotráfico y la delincuencia que nos arropa, el narcotráfico es un mal que nos arropa desde hace muchos años, donde su principal función es hacer negocios, ó sea, vender y comprar estupefacientes ilegales, donde en esa acción penetran en los sectores de poder de un país, que incluye los ricos, los medianos y los pobres.
En esta acción se dan luchas infernales por vender o por controlar los lugares de distribución de sus mercancías, los narcotraficante no salen a atracar a los ciudadanos para quitarles un celular, un guillo, o una cadena, pues sus negocios le proporcionan esos lujos y algo más, en esa lucha por vender y mantener sus negocios, ellos comenten ataques sangrientos contra su propia gente , ó sea, los que están de una forma o otra en sus negocios, es difícil observar un ataque a las personas no involucradas con ellos, salvo raras excepciones.
Mientras la delincuencia común que es la que nos arropa y le está dando castigo a la población en este momento, son grupos de desaprensivos armados que no les importa el origen de las personas que ellos asaltan, para ellos perpetuar sus acciones ya sea dentro o afuera de un negocio o sus casa, ellos solo salen a hacer lo que ellos denominan su trabajo que no es más que despojar a la gente de sus pertenencias; en esta acción ellos hieren y hasta matan si es necesario para lograr su objetivo, que no es otro que la búsqueda de dinero, esto es lo que está pasado en el país, la delincuencia ratera que nos arropa, está compuesta por jóvenes que no llegan a los 30 años de edad, donde su única aspiración es enriquecerse delinquiendo, para mantener sus gustos y extravagancias, todo esto es lo que las autoridades del gobierno deben eliminar, para que el país no sea declarado un país donde no se puede vivir, adelante, a acabar con la delincuencia en todos los términos. Gracias por leer y comentar.
Por Domingo Plácido
