NEW YORK.- Si hacemos un viaje imaginario en el tiempo y partimos desde el sábado 11 de junio de 1932, para arribar al viernes 16 de febrero de 1973. Matemáticamente habremos surcado la cantidad simple de 40 años, 8 meses y 5 días, un ejercicio aritmético sin relevancia, un planteamiento de cálculo sin la mayor connotación.
Pero cuando ponemos entre esas fechas el punto de partida un hombre, el ejercicio matemático adquiere otra connotación de dimensiones inmensurables, el planteamiento de este cálculo se baña de historia, honor y heroísmo, las tres “H” que acompañaron a Francisco Alberto Caamaño Deñó toda su vida.
Hijo de un esbirro de la dictadura Trujillista, el teniente general Fausto Emigdio Caamaño Medina y de la señora. Enerolisa Deñó Chapman, mejor conocida como “Nonin”. Nace en Santo Domingo el 11 de junio de 1932 y es en este punto de partida en el cual el viaje imaginario empieza a adquirir los matices que dan como resultado la inmortalidad de Francis.
En el ambiente militar en que se crió, desde niño desarrollo un carácter recio y autoritario, cualidades que le acompañaron en sus estudios escolares en el colegio Salesiano en San Cristóbal y en el colegio Santo Tomás ubicado en la calle Padre Billini esquina callejón de Regina. Su padre que lo crió para ser militar lo envió muy joven a la academia Militar Riverside en Gainesville, Georgia, regresando para terminar sus estudios en el colegio de La Salle.

Como joven criado para la vida de cuarteles, ingresó como cadete a la Marina de Guerra como Cadete el lunes 18 de julio de 1949 con la edad de 17 años no cumplidos.
Se graduó como Alférez (Teniente de Corbeta en la armada y Segundo Teniente en las demás ramas militares), como excelente estudiante y al estar bajo el amparo de su padre que era Secretario de Estado de las Fuerzas Armadas, asistió a otras academias militares en los Estados Unidos donde cursó especialidades que lo hicieron merecedor del ascenso a Capitán y nombrado como instructor o profesor de la academia militar dominicana. Esto evitó que el joven Caamaño fuese involucrado en crímenes y delitos de Estado, muy comunes durante la dictadura.
Con el rango de Mayor es nombrado Intendente General de la Aviación Dominicana y por su récord intachable y sus dotes de comandante es transferido para formar la unidad anti-motín de la Policía Nacional, conocida como los “cascos blancos” ubicada en la fortaleza Ozama y para estos fines es ascendido al rango de teniente coronel el martes 22 de mayo de 1962, siendo ascendido nuevamente al rango Coronel dos meses y varios días después, el miércoles 1 de agosto de 1962.
Los acontecimientos que afectaron a la sociedad dominicana después del asesinato de Trujillo y todos los desmanes posteriores a este acto de hombres “heroicos”, carentes del entendimiento, para reconocer que la muerte del dictador no eliminaba la dictadura, fueron puliendo en Caamaño, la conciencia nacionalista y endureciendo en él, el compromiso y el deber del militar con el pueblo.
Más adelante los hechos de sangre, el libertinaje, el pillaje y el ajuste sumario de cuantas que arroparon nuestra sociedad quedaron más que evidenciados en las atrocidades perpetradas por Ramfis Trujillo y el alto mando militar que se ensañó contra todo el que tuviese delante o detrás, uno de los apellidos de los que participaron en el asesinato de su padre, sin contar como después de la salida de los Trujillo, la oligarquía y la burguesía se repartieron los bienes y propiedades del Estado, como si fuesen un patrimonio heredado por ellos y en todo estos desafueros, no se menciona al Coronel Francisco Alberto Caamaño Deño, lo cual ya indicaba el grado de honestidad y pulcritud con que desempeño sus funciones y acciones, en vista de su rango y responsabilidades.
Entre el año 1916 y 1922 un movimiento mágico religioso que se originó en la comunidad conocida como Palma Sola, en Las Matas de Farfán, hubo más de 16 encuentros armados entre este grupo liderado por Liborio Mateo Ledesma, mejor conocido como “Papá Liborio”; Quien en 1894 se presentó en su comunidad como un “escogido” con poderes para curar y dones de profecía, fundó una comuna basada en lo mágico-religioso y el sincretismo católico. Las peregrinaciones masivas a Palma Sola eran tan masivas, que se convirtieron en un dolor de cabeza para las tropas de ocupación y al percatarse del carácter mesiánico que inspiraba el movimiento lo vieron como una amenaza para la estabilidad y el control de la región.
El martes 27 de junio de 1922, fue aplacado el movimiento liborista con la muerte de “Papá Liborio” en el lugar conocido como “La Peñita”. Desde entonces el Liborismo se practicó de manera clandestina durante el resto de la ocupación y los 30 años de dictadura.
En 1962 los hermanos mellizos Romilio y León Ventura Rodríguez retomaron el culto a “Papá Liborio” en Palma Sola y se reinició el mismo fenómeno mágico-religioso y con algunas connotaciones políticas, lo cual preocupó al gobierno provisional de Rafael Filiberto Bonnelly Fondeur, quien autorizo el envío de tropas a Palma Sola las cuales arribaron el jueves 27 de diciembre de 1962 a San Juan de la Maguana.
Entre los enviados figuraba el Coronel Francisco Alberto Caamaño Deñó, mientras que el comandante lo era el General Miguel Francisco Rodríguez Reyes que fue asesinado en el enfrentamiento y Caamaño fue herido. En las negociaciones el Coronel le garantizo la vida a León Romilio Ventura Rodríguez “El Mellizo”, sobreviviente de la matanza que culminó el viernes 28 de de diciembre de ese año, episodio del cual salió inmaculado una vez más el Coronel Caamaño
En 1963 es elegido presidente el profesor Juan Emilio Bosch y Gaviño, episodio que motivó a la iglesia a asociarse con la burguesía y los militares que obedecían al dictador muerto y sus intereses, para darle al país el peor de los golpes, que tronchó el miércoles 25 de septiembre de ese año, las esperanzas de un pueblo que empezaba a renacer y a orientarse hacia la libertad, la cual prometió Juan Bosch no desaparecería mientras él estuviese gobernando el país y de esa manera la dictadura, que no fue derrocada por los braguetuses del 30 de mayo de 1961, volvió al poder en una sucesión de formulas, las cuales no salieron de la voluntad del pueblo, porque no se correspondían a los intereses de los oligarcas locales y extranjeros.
Este estado de cosas inspiro en el movimiento 14 de Junio, liderado por Manuel (Manolo) Aurelio Tavares Justo el levantamiento guerrillero de las Manaclas el jueves 28 de noviembre de 1963, para reclamar con las armas el retorno a la democracia, e Igual que en el golpe de Estado de septiembre los mismos militares dieron muerte a Manolo y sus compañeros el sábado 21 de diciembre de ese año y en estos hechos, el Coronel de abril no se involucra y mantiene su imagen limpia dentro de su carrera militar.
Después de este trayecto era imposible que Francisco Alberto le diera la espalda al pueblo, como lo hicieron los militares trujillistas que bombardearon la población civil entre el sábado 24 y el miércoles 28 de abril de 1965, para luego mancillar la soberanía apoyando la invasión norteamericana y cooperando con estos para masacrar a un pueblo heroico, del cual Caamaño se constituyó en líder y presidente ante la ausencia del artífice del movimiento, el Coronel Franklin Tomás Fernández Domínguez.
Fue en la gesta de abril, cuando el Coronel Caamaño se consolidó como comandante y líder del pueblo en armas junto a otro puñado de valientes que gozan hoy de inmortalidad en la memoria del pueblo.
Los acontecimientos del martes 27 de abril de ese año en la cabeza oeste del puente Duarte, militares y civiles al mando del Coronel Caamaño, palpitan todavía en la memoria de actores y testigos oculares que todavía viven, reconociendo al Coronel como el líder militar y político de esa gesta, que dejó en ridículo al CEFAS y a Elías Wessin, que no tuvieron reparos en su intento de masacrar de ser necesario a todos los ciudadanos que se opusieran a sus aspiraciones apoyadas por el gobierno de Lyndon Baines Johnson, quien respondió de manera inmediata a la solicitud del militar más funesto de nuestra historia reciente.
El arrojo y valentía de Caamaño le lleno de méritos para ser nombrado presidente del pueblo en armas el lunes 3 de mayo de 1965 y la toma de posesión se realizó en parque independencia y el Coronel Franklin Tomás Fernández Domínguez retorna clandestinamente retorna clandestinamente al país y muere en el asalto al Palacio Nacional el miércoles 19 de mayo de ese año, Francisco Alberto fue Presidente Constitucional hasta el viernes 3 de septiembre, cuando entrega la Presidencia a Héctor Rafael García Godoy Cáceres luego de negociar el cese de fuego con invasores y traidores.
En todos los episodios de esta gesta, Caamaño brilló y afectó el fervor popular, inspirando el ideal revolucionario en toda la juventud de entonces y generaciones futuras.
El domingo 19 de diciembre de 1965 los líderes constitucionalistas viajaron a Santiago de los 30 Caballeros a decir presente en una misa dedicada al Coronel Franklin Tomás Fernández Domínguez y tropas del Ejército y la Fuerza Área apoyados por las fuerzas de ocupación, quisieron aprovechar la ocasión para eliminar a todos los constitucionalistas en un acto cobarde e infame, pensando que sería algo rápido y fácil en vista de la superioridad numérica y de armamentos, a este episodio se le conoce como la Batalla del Hotel Matum. Aquí volvió a brillar el coraje y la capacidad de combate de los constitucionalistas, con el mismo esplendor que en el puente Duarte. Desde las 9 de la mañan hasta las 5 de la tarde, 7 horas de resistencia y arrojó, donde las bajas de los constitucionalistas atrincherados en el hotel sumaron dos, el coronel Juan María Lora Fernández, jefe de Estado Mayor del Ejército Constitucionalista y su asistente el sargento Domingo Antonio Peña Liriano, mientras que los infames que atacaron a este pequeño grupo sufrieron aproximadamente unas 70 bajas.
En vista de la situación se acordó exiliar a los líderes militares del movimiento constitucionalista y así es cuando el sábado 22 de enero de 1966 sale para Inglaterra el Coronel de abril.
En octubre de 1967 Francisco Alberto se traslada a Cuba para continuar con su proyecto revolucionario y sacar del poder al más funesto de todos los que han ocupado el Palacio Nacional, Joaquín Antonio Balaguer Ricardo. Desembarco con 8 hombres el viernes 2 de febrero de 1973 y 14 días después, el viernes 16 de febrero de ese año, cae herido en coronel Caamaño y es apresado junto a sus compañeros también heridos Heberto (El Fiero) Giordano Lalane José y Alfredo Pérez Vargas. Cuando el entonces Ministro de las Fuerzas Armadas Ramón Emilio Jiménez Collie se comunicó con el Presidente Balaguer para informarle de la captura del Coronel Caamaño, el “muñequito de papel” respondió:
“En el país no hay cárceles para un hombre como el coronel Caamaño”. De esta manera dejó implícita la orden de asesinarlo.
Se ensañaron contra el cuerpo del Coronel Caamaño y sus compañeros, después de descargar ráfagas en sus cuerpos, le rompieron los huesos de la cabeza y las coyunturas con las culatas de los fusiles procediendo a descuartizarlo y luego quemar sus restos en una hoguera que duró toda la madrugada, creyendo que con este acto eliminaban la memoria y el ejemplo de un hombre de una estatura inaccesible para cobardes y asesinos.
Hoy 11 de junio, es bueno honorable recordar este ejemplo y reconocer que esta inmolación detuvo un proceso que no hemos podido reincorporar en la sociedad dominicana y que el resultado ha sido el robo, la corrupción, el desfalco de parte de politiqueros, que persisten en vender incluso nuestra identidad, cultura y folclore, negociando el país como si se tratara de una parcela dividida en solares.
Honra al Coronel de abril y Comandante de febrero, Francisco Alberto Caamaño Deñó, a 91 años de su nacimiento.
POR TOMAS HERNANDEZ
Con mucha delectación acabo de leer su escrito el cual ofrece mucha información vital para entender la historia reciente de nuestro país. Muchas gracias por explorar estos temas…